Aunque esta pequeña casita es real, en realidad es una obra de arte que fue criada por estadounidense William Lamson como parte del espectáculo Storm King Art Center’s Light and Landscape Show 2012.
Es una obra de arte realizada en tonos variables
Esta instalación lleva el nombre "Solarium" y para su construcción se han utilizado162 paneles de azúcar caramelizada. Para conseguir la variedad de los tonos, desde dorado hasta el color naranja de cada uno de los paneles, el criador ha utilizado la tecnología de calentar el azúcar a temperaturas distintas. Así ha logrado el efecto que ha buscado para esta obra de arte- que cada uno de los paneles lleva su propio color para reflejar la luz natural que entra por ellos en tonos diferentes.
Los colores distintos se consiguen con temperaturas diferentes
La azúcar caramelizada se introduce entre dos láminas de vidrio a modo sandwich. En el transcurso del verano, con la temperaturas que suben y una humedad típica, esta casa atípica colocada bajo el sol hace que se suaviza este material de construcción tan inusual y tras una transformación se convierte en jarabe que goteará hacia abajo de las ventanas y la parte posterior de la casa.
La temperatura y la humedad provocan un cambio continuo de los colores de esta obra de arte
Mirada desde acerca esta magnífica obra de arte moderno provoca el interés de los visitantes ya que hay un juego de luces y colores que impresiona pero desde lejos es aún más espectacular con la amplitud de los colores vivos que contrastan con el ambiente que la rodea.
La vista de esta obra de arte de cerca es interesante, de lejos- impresionante
Caramelo de color se introduzca entre láminas de vidrio
La luz que entra hace magia con los colores
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